Desde que saltó la noticia de que la última motocicleta comprada por Elvis Presley iba a ser subastada, junto con algunos de sus coches más deseados, se especulaba con que se convertiría en la moto más cara de la historia.
Se hablaba de que la maravillosa Harley-Davidson FLH 1200 Electra Glide negra y azul cielo adquirida por el Rey del Rock and Roll en 1976, un año antes de morir, podría alcanzar los 2 millones de dólares a golpe de martillo.
La moto estaba llamada a pulverizar récords, sobre todo teniendo en cuenta que, como el mismo Rey Midas, Elvis parecía convertir en oro todo lo que tocaba. Sin embargo, para sorpresa de muchos, el precio final de la pieza ha quedado bastante lejos de lo esperado: 800.000$.
Una considerable cifra que únicamente le ha valido para obtener el tercer puesto en el podio de las motocicletas subastadas más costosas, por encima de la Fat Boy que Schwarzenegger montó en 'Terminator 2' (512.000$) o la Dyna Super Glide del Papa Francisco (327.000$).
La ex moto de Elvis estuvo cerca de alcanzar el segundo puesto del insigne ránking, que va a seguir conservando de momento la Cyclone Board Track Racer de 1915, cuyo precio ascendió a 852.000$. Claro que se trata de un modelo exclusivo del qie sólo se fabricaron 12 unidades y su propietario fue nada menos que el mítico Steve Mcqueen, lo que también aumentó su valor.
Más lejos se ha quedado la moto de El Rey de los 929.000$ de la Vincent Black Lightning, de 1951. Curiosamente, la puja más alta por esta otra máquina de carreras completamente original, llegó vía telefónica desde Australia, a la subasta celebrada en el Río Hotel & Casino de Las Vegas.
Sea como fuere, hay que ser muy pero que muy fanático para pagar esa auténtica fortuna por una motocicleta de 43 años con la que Elvis sólo llegó a rodar 126 millas (203 km), según aparece registrado en su cuentakilómetros. Se rumorea que "El Rey" tan sólo la condujo de California a su mansión de Graceland, Memphis (EEUU), donde tenía su residencia.
.jpg)
Realmente el gran Elvis era un entusiasta de los automóviles y de las motocicletas. Sin embargo, durante exitosa carrera como cantante y actor no acumuló muchas motos, sino que las adquiría por simple capricho y solía cederlas luego para fines benéficos. Eso sí, es un secreto a voces que sentía debilidad por las Harley-Davidson, al igual que le sucedía con los Cadillac.
La Electra Glide, lanzada por primera vez en 1955, con un motor V-Twin Shovelhead de 1207 cc, fue uno de los muchos antojos del Rey del Rock and Roll.
La compró totalmente nueva el 11 de agosto de 1976 en un concesionario oficial de Harley-Davidson. A pesar de que no existen fotos de Elvis montando a lomos de su Electra Glide, no cabe la duda de que fue su propietario, tal y como acredita el documento del primer registro de compra a nombre del artista.
Su customización se hizo siguiendo los gustos del icónico artista: una nueva combinación de colores, tapicería cosida de piel, un sinfín de accesorios cromados..., resultando una pieza de ensueño. Pero, se desconoce el por qué, tan sólo un año después de comprarla, Elvis decidió deshacerse de ella convirtiéndola en un objeto de deseo para los coleccionistas.
De hecho, antes de formar parte de la subasta organizada por la GSW Auctions en el Hard Rock Café de Hollywood la insgne motocicleta permaneció durante más de tres décadas en exhibición, encerrada en las vitrinas del 'Pioneer Auto Museum', en Murdo, Dakota del Sur, lejos del alcance de las manos curiosas, por eso su estado de conservación es digno de admiración.
Después de conocer los detalles, ¿cómo lo ves? Si tu bolsillo lo permitiera... ¿pagarías un precio así por la moto de tu ídolo?
