Hace algún tiempo que empezaron a escucharse rumores sobre el trabajo que estaba realizando Honda en una cruiser más grande, en concreto la “hermana mayor” de la CMX 500 Rebel, y a principios del pasado mes de noviembre anunció su lanzamiento. Estas motos tipos “bobber” muy minimalistas con carácter cruiser, vuelven a dar vida a ese gran catálogo “custom” que tenía la marca japonesa y que rivalizaba con los modelos oriundos de Estados Unidos.
Ahora Honda plantea una moto mucho más centrada en el mercado europeo, que comparte muchos rasgos con su “hermana menor” la CMX 500, no solo el motor bicilíndrico en línea, sino también las líneas del chasis y la carrocería. No hay que olvidar que la 500 fue presentada en 2017 y según los datos de la propia firma, este fue el tercer modelo “custom” más vendido en Europa el año pasado. Y es que, Harley-Davidson, dejó de vender en el segmento de las Sportster ante la incapacidad de cumplir con la exigente normativa Euro5, y obviamente es algo de lo que ha sacado provecho la marca japonesa.
La CMX 1100 con una altura del asiento a tan sólo 700mm, invita a usarla a cualquier conductor sea cual sea su talla. Por otro lado, dispondremos de una “custom” de solo 223 kg, frente a los 248kg de la Iron 1200 por ejemplo.
En lo que se refiere al motor, el origen es el de una moto trail, por lo que ya sabemos que será un elemento compacto y estrecho. Es heredado de las primeras versiones de la África Twin, que ahora cuenta con dos cilindros en paralelo de 1084 cc con 87 cv de potencia a 7000 rpm y 98 nm de par máximo en las 4750 rpm. El propulsor se gestiona mediante acelerador electrónico Throttle By Wire (TBW), que nos permite disfrutar de tres modos de conducción además de un cuarto modo “User” que es personalizable. Por lo tanto, tenemos el modo “estándar” que nos proporciona una marcha relajada a rpm y velocidades bajas; el “rain” si nos enfrentamos a superficies mojadas o deslizantes y necesitamos reforzar la seguridad; el “sport” con el que conseguimos la máxima entrega de potencia y un freno motor estándar; y por último, el “user” con el que podrás personalizar los ajustes con tu combinación favorita.
Esta CMX 1100 se podrá pedir opcionalmente con el cambio doble embrague Honda DCT dando elección de conducción automática y manual mediante levas en la piña izquierda.
Una de las diferencias que tiene con la 500 se aprecia en las ruedas, ahora, la llanta delantera pasa a ser de 18” con un neumático 120/70, y la trasera es de 16”. También es distinto el sistema de frenos, con un único disco delantero como en la 500 cc, pero de 320 mm y con una pinza de cuatro pistones de anclaje radial. Y no podemos olvidar el amortiguador trasero, que ahora es regulable y dispone de depósito de gas separado.
Y como no podía ser de otra manera, la firma japonesa tiene preparado todo un abanico de piezas y accesorios para personalizar esta custom como son asientos, parrillas traseras, visera para el faro… Por otra parte, son dos los colores que en principio se han presentado. Por un lado el negro metalizado “Gunmetal” y de otro, el rojo burdeos metalizado.