1. Triumph Bonneville Speedmaster
La Speedmaster es la tercera versión dentro de la familia Boneville, muy ligada a la Bonneville T120 y la Bonneville Bobber. De la Boneville T120 hereda elementos clásicos como el depósito esculpido o las aletas del motor mecanizadas. Si nos fijamos en su parte trasera de aspecto rígido sin duda recordaremos a la Bobber, junto su carrocería minimalista.
Si algo destaca en la Speedmaster son los elementos únicos que forman su estética; el faro delantero estilo góndola, manillar inclinado o las llantas de radio de 16 pulgadas. Sorprende en esta moto la comodidad, ya que han aumentado la capacidad del depósito a 12 litros. Además de la oportunidad de poder usar un asiento biplaza o mono, y ambos con un buen acabado acolchado.
Llegó el momento de hablar de su potente motor el cual ofrece una entrega suave y lineal, es el tradicional 1200cc. Su rendimiento es de 77 CV y de 106 Nm a 4.000 rpm y cuenta con dos modos de conducción: Road y Rain. Ya adaptado a la normativa Euro5 enfatiza notablemente por su sonido ronco.
Si hablamos de la suspensión tenemos que mencionar el estreno de la horquilla Showa convencional con barras 47mm y un monoamortiguador trasero que se encuentra oculto. Los frenos cómo no son Brembo, en el delantero encontramos un doble disco 310 mm con pinzas Brembo de doble pistón y otro trasero de 255 monopistón y pinza Nissin. Ambos dotados de ABS. A su aspecto clásico se le suman algunos elementos más actuales como la iluminación de LED o el embrague antirrebote.
2. Harley Davidson Low Rider S
Vehículo que ha sufrido una enorme renovación, con un potente motor Milawaukee-Eight 117, además de carenado y maletas. A pesar de tener una gran esencia deportiva no pierde su estética clásica que toda moto Custom debe mantener. La novedad que nos encontramos es que elimina por completo los cromados y cuenta con una suspensión y frenos de gran eficacia.
El nuevo propulsor, de refrigeración aire/aceite, ofrece una potencia de 105 CV y una contundente cifra de par de 168 Nm, además se nos permite aumentar esta cifra a través de un kit oficial.
Algo que también se ha mejorado notablemente es su agilidad, contiene un chasis Softail con tubos de acero al que se le une un monoamortiguador trasero regulable y una horquilla invertida. Además de un doble disco delantero y sistema antibloqueo ABS.
La parte de atrás se encontraría bastante despejada debido al bajo asiento y el guardabarros recortado. Otro elemento que la diferencia notablemente serían sus llantas de fundición de aluminio.
Su precio oscilaría entre los 23.500 euros.
3. Harley Davidson Street Bob 114
Es la moto más básica de la familia Softail pero equipada con el mejor motor Milwaukee-Eight 114, el más potente de toda la gama. A pesar de su apariencia Bobber destaca su manillar "mini-ape" y sus guardabarros recortados. Si algo la convierte en una auténtica y flamante “dragster” es su motor, el cual tiene una cilindrada de 1.868cc con una potencia de 94 CV a 5.020 rpm y una contundente cifra de par de 155 Nm a 3.250 rpm.
La horquilla cuenta con un sistema "Dual bending valve" de doble válvula flexible y un monoamortiguador trasero ajustable.
El asiento es de doble nivel y cuenta con estriberas de serie para piloto y pasajero. Si hablamos de su apariencia debemos mencionar que presenta un logo con el nombre de Harley-Davidson sobre el color secundario, con el ya clásico número uno en el depósito. Los colores disponibles son los siguientes: Vivid Black, Stone Washed White Pearl, Baja Orange y Deadwood Green.
4. Harley Davidson Sportster S
Sin duda un proyecto notablemente ambicioso en cuanto a tecnología y motor, una gran apuesta a la deportividad. No apta para los clásicos de las Harley-Davidson, sino que busca contentar a un tipo de cliente diferente y no tan purista. Esta moto se define prácticamente por su motor, un gran bicilíndrico en V a 60º de 1250 cc denominado Revolution Max 1250T que apuesta por una aceleración muy vigorosa gracias a sus 122 CV y 127 Nm de par. Los ejes de balance internos permiten unas vibraciones muy controladas y los pistones de aluminio forjado le garantizan una gran durabilidad.
Estéticamente destaca el escape de doble salida por la parte alta derecha, un detalle muy deportivo y de clara inspiración flat track. No podemos mencionar a la Sportster S sin hablar de su punto fuerte: su electrónica. Gracias a una plataforma inercial de seis ejes, ofrece sistema ABS con funcionamiento en curva, control de tracción sensible a la inclinación y control de freno motor que también actúa en curva.
Sus modos de conducción la hacen una moto muy adaptable, y serían los siguientes: rain, road, sport y custom.
5. Harley Davidson Sport Glide
La Harley-Davidson Sport Glide es una Softail muy interesante que se distingue por su agilidad, suspensiones y versatilidad de carenado y maletas desmontables, una sport-turismo en toda regla apta para largos trayectos. Ya adaptada a la Euro5, las maletas de serie y el mini carenado delantero se pueden desmontar sin herramientas, lo que permite pasar de touring a sport en un tiempo récord.
La iluminación cuenta con tecnología LED y de conducción diurna y además cuenta con un puerto USB para cargar dispositivos móviles. Su precio oscila en torno a los 21.600 euros y los que la han probado nos confirman que destaca por su gran confort de marcha. Podemos encontrarla en diferentes tonalidades: Vivid Black, Gauntlet Gray Metallic y White Sand Pearl.
6. Indian Scout Bobber
Aunque más ligera y asequible que otros modelos dentro de su gama destaca por su potente motor. Es una familia que se compone de cuatro versiones: la estándar, la Bobber, la Bobber Twenty y la Rogue, versión lanzada en 2022. Todas ellas contienen un motor V Twin refrigerado por agua y con cuatro válvulas por cilindro con una cilindrada de “sólo” 1.133 cc y 94 CV. Como novedad el asiento se encuentra situado en una posición especialmente baja lo que favorece la conducción en ciudad y una ayuda para los pilotos menos experimentados.
Los frenos cuentan con un sistema ABS de serie y su manillar mini-ape complementa su imagen audaz, incitando al motorista a practicar una conducción tan agresiva como su look.
7. Honda Rebel 1100
Moto custom pero dotada de un motor contundente que cuenta con potencia suficiente para disfrutar a cualquier velocidad. Su apariencia es notablemente minimalista y también podríamos decir lo mismo de su electrónica, con sistema DCT opcional. Moto que recuerda mucho a su prima hermana la Honda Rebel 500 ya que ambas han sido diseñadas por el mismo departamento. Lo que más destaca es su faro redondo FULL LED situado entre medias de dos intermitentes igualmente en forma de círculo.
Ahora hablemos de su motor; monta el ya conocido dos cilindros paralelos de 1.084 cc pero adaptado al uso cruiser que se le supone a esta moto. Aguanta una potencia superior a 85 CV a 7.000 rpm y su cifra de par se sitúa en 98 Nm a 4.750 rpm, con un comportamiento ligero y una entrega lineal para disfrutar en todo tipo de circunstancias.
Cuenta también con un acelerador electrónico que contiene dos opciones: manual o semi automático.
Cuenta con una horquilla convencional con barras de 43 mm de acabado oscuro y con un par de amortiguadores traseros. La instrumentación está compuesta por una pantalla digital LCD, con numerosa información.
8. Royal Enfield Meteor 350
Increíble naked de estilo custom la cual se divide en tres versiones muy diferenciadas en el equipamiento (Fireball, Stellar y Supernova).
La marca ha recuperado el nombre de “Meteor” que proviene de un modelo de inspiración que se lanzó en los años 50. Su elegancia no está reñida con su sencillez y destaca por la fusión entre elementos analógicos y digitales en la instrumentación. Es decir, en un lado nos encontramos con un reloj compuesto con un velocímetro analógico y una pantalla digital LCD que nos aporta por ejemplo la contabilización de kilómetros o el nivel de combustible. Los que la conocen comentan que es un marcador muy intuitivo y también cuenta con una toma USB en el manillar.
Llegó el momento de hablar de su motor; equipa un motor monocilíndrico de 349 cc de refrigeración por aire y aceite cuya potencia apenas supera los 20 CV a 6.100 rpm y cuya cifra de par asciende a 27 Nm a 4.000 rpm.
La Royal Enfield Meteor destaca sin duda por sus grandes opciones a la hora de la personalización.
9. Kawasaki Vulcan S
Gran moto urbana, pero de rasgos custom y propulsada por un motor de dos cilindros. Usa una combinación de llantas de 18” delante y 17” detrás, y aporta una ergonomía en la conducción muy avanzada. Cuenta con diferentes acabados y la instrumentación combina un tacómetro analógico junto a una pantalla LCD.
La Vulcan S cuenta con dos versiones: Performance (destaca por su deportiva cúpula cortavientos) y Tourer (cuenta con un respaldo para el pasajero e incrementa un perfil mucho más turístico). Una moto perfecta para comenzar en el mundo de las motos y no sólo por su asequible precio.
10. Honda Rebel 500
Moto minimalista de esencia Bobber, una moto de inspiración clásica, pero con una puesta en escena muy actual y original. El motor de la custom es el mismo que utiliza la deportiva CBR500R, un bicilíndrico paralo de 471 cc, 8 válvulas cuya potencia se fija en 45,6 CV, lo que valida a la Rebel para ser usada por los usuarios del carnet A2. Su escape va enfocado a superar la normativa Euro5 ya que monta un nuevo sensor de gases y se mejora notablemente en silenciador. Tiene 120 mm de diámetro y luce un diseño estilo "shotgun" con 120 mm de diámetro que aporta un sonido poderoso para acompañar el empuje de sus 43,3 Nm a 6.000 rpm.
El precio de salida no llega a los 7.500 euros y luce un color específico denominado Gris Axis mate metalizado dando la oportunidad al comprador de hacer una gran personalización.
