En este proyecto, bautizado como HD350, tendrá como socio privilegiado a uno de los valores en alza del mercado chino, el gigante Quianjiang Motorcycle, que actualmente se encarga de la fabricación de la italiana Benelli.
Sin ir más lejos, los bocetos que han ido saliendo a la luz nos revelan que la nueva moto va a contar con el bastidor de la reconocida Benelli 302S, de modo que Harley ha querido comenzar el experimento sobre seguro.
Como es de suponer, los concesionarios de China serán los primeros en poner a la venta el nuevo modelo de Harley a partir de este año, para luego pasar a comercializarse en India, otra pieza fundamental en el mercado mundial de las dos ruedas. El resto del mercado, si es que acaba llegando, vendría después.
Pero, ¿por qué una 350? ¿Realmente necesita Harley-Davidson una moto de baja cilindrada? Y, ¿por qué producirla en China precisamente? Pues bien, vayamos por partes.
La empresa, a diferencia de lo que puedan pensar sus seguidores más fieles, tiene claro que sí, que con una versión de menos de 350cc da un paso hacia adelante en su afán de ampliar su tipo de público. Sobre todo, teniendo en cuenta el extraordinario peso que tienen los asiáticos en el mercado mundial.
Con ello, al igual que sucede con la incorporación de su primera moto eléctrica, la Livewire, Harley-Davidson no hace otra cosa que reforzarse de cara al futuro. El objetivo fijado no es otro que alcanzar de aquí a 2027 un crecimiento del 50%. Es, por tanto, un punto más de su estrategia de expansión.
Algo ambicioso, qué duda cabe, pero totalmente factible dadas las previsiones calculadas por la marca, que, al margen de su Livewire, también en 2020 comercializará su maxitrail HD Pan América y la naked HD Bronx.
El acuerdo alcanzado por Harley Davidson y el fabricante chino gira en torno a una nueva motocicleta utilitaria, dirigida a mejorar la movilidad de los habitantes de China y otros países asiáticos superpoblados.
La icónica compañía estadounidense no es muy dada a correr riesgos innecesarios, por eso se ha decantado por utilizar como base una motocicleta ya existente, si bien habrá que esperar un poco más para ver el resultado final.
Por el momento, lo que sí se sabe es que tendrá una estética renovada, con una nueva carrocería y contará con la incorporación de detalles harlistas que la harán más deseable para los moteros asiáticos demandantes de máquinas menos potentes.
La nueva apuesta Harley-Davidson contará con el mismo cuadro que la Benelli 302S, pero todo indica a un bicilíndrico de 338cc, vendrá a sustituir al de motor de 302 del modelo italiano. Además, es de suponer que serán innegociables los elementos distintivos que han hecho grande a la firma americana, como el faro principal o el diseño en lágrima del depósito de combustible. Parece que su línea, eso sí, será más deportiva. Y que de llegar a Europa -algo que todavía está muy en el aire- podría competir, entre otras, con motos de tamaño medio como la BMW G310 R o la KTM 390 Duke.