Lo primero es tener muy en cuenta el espacio con el que cuentas. Obviamente una moto no tiene la misma capacidad de almacenaje que un coche... Para tu día a día, bastará con llevar una mochila con espaldera a cuestas o, mejor aún, contar con un baúl instalado en la parte trasera de la motocicleta. Pero en desplazamientos largos lo más recomendable es el uso de maletas o alforjas para transportar el equipaje.
Una vez planificado el destino y la duración de tu viaje, te aconsejamos realizar una lista con las cosas más importantes que vas a llevarte: impermeable, chaleco reflectante, kit de herramientas básicos, kit reparador de pinchazos, un pequeño botiquín... Son artículos básicos, que no ocupan mucho espacio y pueden salvarte más de una vez.
Con todo, lo que más quebraderos de cabeza puede darte es guardar la ropa. Doblarla bien o incluso hacerla rollitos te ayudará a ahorrar espacio. No tienes que preocuparte por la ropa más voluminosa y pesada, la de seguridad, ya que irá contigo puesta durante todo el viaje.
Para salvaguardar la ropa de posibles mojadas puedes utilizar las bolsas de tela que vienen con las alforjas. No te vuelvas loco, llévate lo indispensable. Y si tu maleta no las tiene, siempre queda la opción de usar bolsas de plástico.
Preferiblemente, las maletas laterales son las que se utilizan para guardar la ropa, de modo que los documentos referentes a la moto y los efectos personales queden más a la mano. Es sumamente importante que la documentación esté accesible.
En el mercado hay multitud de maletas de diferentes tipos, capacidades, de distintos materiales, con gran variedad de calidades, que pueden ajustarse a tu gusto y bolsillo. Te ayudamos a elegir la maleta o alforja que mejor se adapta a tus necesidades, la más adecuada para tu estilo de moto, para que puedas transportar tu equipaje de la forma más cómoda y segura posible.
Baúl o cofre trasero (´top case’): El cofre trasero es el habitáculo de carga para motos más práctico y extendido. Está especialmente indicado para el día a día, puesto que al no sobresalir por los laterales, no te restará agilidad en el tráfico habitual de la ciudad.
Su fijación a la moto, así como su cierre, suelen tener una cerradura, para evitar su hurto.
Existen de muy diferente diseño, tamaño y capacidad. Si vas a usarlo para desplazamientos urbanos, nuestro consejo es que te decantes por un baúl pequeño, ligero y compacto, ideados para que quepa un casco integral.
Si prefieres contar con algo de más capacidad, también están los baúles medianos, aptos para guardar un par de cascos de tipo ‘jet’, o los baúles grandes, donde caben dos cascos de tipo modular o integral. Están pensados para viajes de mayor distancia.
En cualquier caso, lo más importante en el uso de una maleta para tu moto es evitar la sobrecarga. Ten muy en cuenta el peso máximo que recomienda el fabricante para que las fijaciones no resulten dañadas o perjudiquen la estabilidad de tu motocicleta.
Maletas laterales rígidas: Ideadas, junto con el ‘top case’, para aumentar la capacidad de carga de las motos ‘touring’ o ‘maxi trail’. Las maletas rígidas son más duras y soportan mejor los golpes y las inclemencias meteorológicas. Los modelos con diseño más aerodinámico contribuirán al ahorro en combustible.
Considera su capacidad de carga según la cantidad de equipaje que vayas a llevar, así como su sistema de apertura, si prefieres cierre frontal o lateral. Y valora, además, que su montaje y desmontaje sea sencillo y te resulte fácil de transportar cuando las hayas quitado de la moto.
Alforjas laterales blandas y de piel: Especialmente pensadas para las motos maxi trail, nacked y custom, estas alforjas tienen gran capacidad y son más sencillas de montar. Están fabricadas con materiales tipo cordura, nylon o piel, por lo que son mucho más ligeras y también resistentes. Otra ventaja es que pueden cogerse por el asa o llevarlas colgadas al hombro como un bolso convencional.
Sin embargo, hay que comprobar que quedan bien cerradas y sujetas a la moto, ya que su anclaje es mucho más inestable que las rígidas y pueden ocasionar algún incidente si no están correctamente ancladas a la moto.
Pueden ser de gran utilidad en este punto elementos como los pulpos o redes, para que las alforjas no se desplacen o caigan durante el desplazamiento, o el resultado puede ser nefasto.
Mayormente destinadas a las motos de estética custom, las alforjas de cuero son mucho más elegantes y vistosas, aportando un toque de exclusividad que no suelen conseguir las demás. Eso sí, los cierres suelen ser convencionales, tipo hebilla, con lo que hay que tener mil ojos con los amigos de lo ajeno.
Alforjas para motos deportivas: Son compatibles con las motos deportivas, adaptándose perfectamente a su fisonomía, cuentan con varios puntos de anclaje y suelen incluir bandas reflectantes en la parte trasera y flancos, lo que aporta mayor seguridad a los pilotos.
Alforjas impermeables: Están fabricadas con un tejido impermeable de alta calidad y costuras reforzadas, que evitan la entrada de agua de lluvia, así como un acolchado en el interior que garantizan el perfecto estado de los objetos. Suelen llevar varios bolsillos con cremallera y aunque tienen apariencia más sport, son universales, pudiéndose utilizar en motos de muy diferente estilo.
Alforjas semirrígidas: Aportan mucha resistencia , pero al no ser excesivamente dudas, son cómodas y nada molestas. Hay algunas extensibles, con lo que pueden adaptarse casi a cualquier tipo de motocicleta.
Alforjas horizontales dobles: Se colocan de manera horizontal, mediante correas. Tienen un compartimento central bastante amplio y suelen incluir diferentes bolsillos exteriores. Normalmente están fabricadas con nylon, con lo que su protección contra el agua es aceptable.
Bolsas para el sillín: Suelen estar fabricadas con los mismos materiales que las alforjas blandas, pero están especialmente diseñadas para colocarse ajustadas en la parte posterior del asiento o del colín, por medio de unas correas.
Bolsas sobre depósito: Más pequeñas que una mochila convencional, se fijan a la motocicleta por medio de correas, imanes (si el depósito es metálico) o incluso soportes específicos. Algunas, además de ser impermeables, llevan una ventana transparente en la parte superior, para poder colocar un dispositivo móvil o GPS y consultar rutas. Incluso pueden usarse como mochilas convencionales una vez desacopladas.
En suma, todo un universo de pequeños y grandes accesorios portatodo, que no harán sino facilitarte cualquier desplazamiento a lomos de tu mejor compañera de viaje.
